En esta tierra la gente llama cochi a los cerdos. Una costumbre -muy indígena- es la de matar un cerdo en un día festivo y hoy precisamente sería uno de esos días en que un cochi iría al matadero si acaso mi abuelo Rigoberto estuviera todavía vivo, ya que es se festejaría un cumpleaños más.
La abuela se preparaba comprando un cerdo joven, criándolo con paciencia y buenas porciones de comida que le tiraba al hocico hambriento del animal. En estas fechas tenía un motivo doble que celebrar. Hoy sería el de su marido Rigoberto, y mañana el anomásico de las Anas: Ella se llamaba Ana y una de sus hijas también se llama así.
Este día precisamente -comenta Agripina- nos comeríamos la sangre del cochi y mañana -agrega- nos comeríamos lo que realmente se considera importante para un gran banquete: las carnitas, los asientos y los tamales.
Pero esta mañana Agripina se siente nostálgica y comenta que ella solamente quiere estaren paz con el mundo y con la gente. Pensando en el gran día de mañana se acongoja, pues es de hermanos felicitarse y desearse lo mejor. Es de pensarse que en un día como mañana le llamaría a su hermana Ana para felicitarla, por lo menos... pero así como están las cosas...
Esperemos que hoy día de cochi Agripina mate todos los malos resabios de los pasados días guarde para mañana, como de costumbre, lo mejor.
In Memoriam :: Maestros Yuri de Gortari and Edmundo Escamilla, Ever in Our
Hearts
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Originally published in 2011, it's time to remind ourselves of the lifelong
work done by these two men: Yuri de Gortari and Edumundo Escamilla. Their
contr...
Hace 1 año
1 comentario:
Qué rico!!!
Se me antojaron unas carnitas...
Bueno, y qué ha pasado, me tienes esperando más historias.
Besos.
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